La senadora de los Estados Unidos, Kirsten Gillibrand, hoy instó al Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) a que le de prioridad a las frutas y vegetables cultivados en Nueva York para su nuevo programa de compra y distribución de alimentos que se preveé que reemplazará el programa de alimentos Farmers to Families Food Box program.
La pandemia por el coronavirus causó estragos en la cadena alimenticia, dejando a muchos agricultores y familias trabajadoras en aprietos económicos. Mientras restaurantes, hoteles, escuelas y otras instituciones que ofrecen servicios alimentarios abandonaron o reducieron sus operaciones, millones de libras de frutas y legumbres fueron botados a la basura, arados o abandonados para podrirse. Mientras tanto, la inseguridad alimentaria se disparó cuando neoyorquinos recién desempleados se enfrentaron a dificultades económicos sustanciales y lucharon para alimentarse con comida saludable ya que suele ser más costosa o no disponible en los llamados desiertos alimentarios. El programa de alimentos Farmer to Families Food Box program contribuyó a cerrar esa brecha al brindar frutas y verduras frescas a las familias pasando hambre. Asegurar que el programa que reemplazará esta iniciativa siga supliendo alimentos nutritivos a las familias necesitadas, lo cual incluye manzanas, cebollas, guisantes y uvas cultivados en Nueva York, ayudará a combatir la inseguridad alimentaria a la vez que contribuirá a un riesgo reducido de enfermedades cardiacas, diabetes, cáncer y obesidad entre las personas en Estados Unidos– condiciones que exacerban la incidencia de síntomas severos de la COVID-19.
“Llevar una dieta nutritiva no debe depender de tu estatus socioeconómico. Sin embargo, la realidad es que familias que pasan hambre no solo les cuesta alimentarse; también les cueta comprar comidas nutritivas que los ayudará a mantenerse saludables durante esta crisis de salud pública”, afirmó la senadora Gillibrand. “El nuevo programa de compra y distribución de alimentos debe conectar la oferta de los agricultores con la creciente demanda de los neoyorquinos necesitados, a la vez que apoye dietas altas en vitaminas y minerales que todos necesitamosp para estar saludables. Los agricultores de Nueva York cultivan alimentos deliciosos y nutritivos como las manzanas, el repollo, la cebolla, los guisantes, las uvas y más. Incluir estos alimentos nutritivos en el nuevo programa fortalecerá tanto nuestras dietas como nuestras granjas, nuestro sistema alimenticio y la economía”.
Para reemplazar el programa de alimentos Farmers to Families Food Box program creado el año pasado, el Servicio de Mercadeo Agrícola (AMS, por sus siglas en inglés) de la USDA está recolectando comentarios en estos momentos sobre el desarrollo, la coordinación y la implementación de un nuevo programa de compra y distribución de alimentos. La USDA ha expresado que la intención de este programa es brindarle apoyo adicional a las organizaciones sin fines de lucro que atienden las necesidades nutricionales de las personas en Estados Unidos.
Gillibrand ha expresado que este programa nuevo presenta una oportunidad única para apoyar a los agricultores de frutas y legumbres en Estados Unidos que han sido fuertemente golpeados por la crisis económica. También ayudaría a combatir la inseguridad alimentaria y nutricional y posiblemente producir mejores resultados en la salud y bienestar de familias en aprietos económicos. Más de 80 por ciento de las personas en Estados Unidos tienen patrones alimenticios bajos en frutas y el 90 por ciento consumen pocos vegetales.
Como miembro del Comité de Agricultura del Senado de los Estados Unidos, la senadora Gillibrand ha trabajado para proteger a los agricultores y reforzar la oferta alimentaria del país, especialmente a lo largo de la crisis por la COVID-19. El año pasado, la senadora Gillibrand presentó el proyecto de ley Food Bank Access to Farm Fresh Produce Act, enfocado en hacerle frente a las disrupciones en la cadena alimenticia causadas por la pandemia del coronavirus y en directamente conectar a las granjas con los bancos de alimentos mediante subvenciones en bloque por $8 mil millones, permitiendo a los banco de alimentos en los estados que más producen frutas y vegetales a comprar cultivos directamente de los agricultores.
El texto completo de la carta en inglés está aquí.